DE DISEÑADOR Y FOTÓGRAFO… ¿A JEFE DE POLICÍA?

Playas de Rosarito, B.C., 18 de julio de 2025. — En Playas de Rosarito, la inseguridad va en aumento, pero al menos las gráficas y las presentaciones del Secretario de Seguridad Ciudadana, Héctor Manzo Ruvalcaba, se ven estéticamente impecables. ¿Será porque antes de dirigir una corporación policiaca, se dedicaba a dirigir… agencias de diseño?

Sí, leyó bien. El hoy titular de la seguridad en el municipio pasó de ser fotógrafo y diseñador gráfico a coordinar a una policía municipal con serios problemas de organización, disciplina y recursos. En su historial destaca haber sido Coordinador del Departamento Creativo y Auxiliar de Producción (que no suena precisamente a «experto en seguridad pública»), y después, como por arte de magia, apareció como Subjefe de Grupo en la Fiscalía Especializada en Delitos contra la Vida en Tijuana. ¿Qué hizo ahí? Nadie lo sabe. ¿Resultados? Tampoco.

Y la pregunta obligada es: ¿qué tiene que ver su perfil profesional con liderar una dependencia que combate el crimen? Porque una cosa es editar fotos y otra muy distinta es enfrentar la violencia, el narcomenudeo y la delincuencia organizada.

¿Y la seguridad, apá?
Rosarito atraviesa uno de los peores momentos en materia de seguridad. Según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, de enero a junio de 2025 se han registrado:

38 homicidios dolosos
112 robos con violencia
64 robos a casa habitación
15 extorsiones denunciadas (aunque se estima el triple no se denuncia)
Y mientras la delincuencia se organiza, en la Policía Municipal:

Se pierden armas de cargo, radios Matra y hasta patrullas que nadie sabe dónde quedaron.
Los oficiales pagan sus propios turnos y mantienen las unidades de su bolsillo.
Hay oficiales sin chalecos antibalas, sin uniformes adecuados y sin gasolina para patrullar.
Y lo más preocupante: varios policías siguen suspendidos por no pasar exámenes de control y confianza (C3)… mientras su jefe, el Secretario, ni siquiera se ha presentado a evaluarse. ¿Miedo a reprobar? ¿O algo qué ocultar?
“Capacitación” de papel…
La última gran estrategia fue enviar a 15 agentes a “capacitación”, dejando zonas enteras del municipio sin cobertura policiaca, como si Rosarito se pudiera poner en “modo avión” mientras regresan los oficiales. Mientras tanto, los robos y asaltos no descansan, y los ciudadanos siguen en manos de la suerte.

Amigos, compadres y presupuesto
Y mientras la tropa batalla con todo, el presupuesto destinado a seguridad (más de $98 millones de pesos en 2025) se reparte entre amigos, compadres y asesores “creativos”, en lugar de destinarse a equipamiento, reclutamiento o inteligencia. Porque claro, primero el Photoshop… luego la patrulla.

¿Hasta cuándo Rosarito tendrá un verdadero perfil en Seguridad Ciudadana?

¿Tendrá que llegar otro “creativo” con experiencia en TikTok para que las balaceras se vuelvan virales, ya que no se pueden prevenir?

¿O seguiremos viendo cómo se edita la realidad… mientras nos roban la seguridad

RC RC